¿QUÉ ES EL TESTÍCULO NO DESCENDIDO (CRIPTORQUIDIA)?
Los testículos se encuentran en el abdomen durante el embarazo y, cerca del nacimiento, ingresan al canal inguinal desde el abdomen y atraviesan la boca externa del canal inguinal, completando su descenso hacia las bolsas. En algunos niños, el descenso de los testículos hacia las bolsas no se completa antes del nacimiento y el testículo permanece arriba, en el abdomen o en el canal inguinal. (Figura 1) Esta afección a veces se observa en ambos testículos y, a veces, en uno solo.
¿Qué tan común es el testículo no descendido?
Aunque es más común en niños nacidos prematuramente, se puede ver en 1 a 5 de cada 100 niños nacidos a término normal.
¿Cuándo se debe tratar el testículo no descendido?
En los niños nacidos con testículos no descendidos, el testículo puede descender espontáneamente a la bolsa en 6 meses. Por esta razón, se sigue al niño durante los primeros 6 meses. Al final de los 6 meses, si el testículo no ha descendido al escroto, se requiere tratamiento.
¿Qué problemas pueden ocurrir si los testículos no descendidos no se tratan?
En los niños no tratados, el riesgo de infertilidad y cáncer testicular aumenta en el futuro.
¿Se pueden eliminar por completo estos riesgos con el tratamiento del testículo no descendido?
Los testículos que se bajan en los primeros 6 meses tienen muchas más probabilidades de alcanzar tamaños testiculares normales después de la cirugía que aquellos que se operan más tarde.
¿Cómo se trata el testículo no descendido?
El tratamiento del testículo no descendido se realiza con medicamentos o cirugía. En el tratamiento farmacológico, se administra la hormona masculina (testosterona) para activar el testículo en su descenso y completar su descenso al escroto; sin embargo, este tratamiento hormonal no se recomienda ya que puede causar algunos trastornos en el funcionamiento del testículo en el futuro.
El segundo y más exitoso método de tratamiento es bajar el testículo al escroto quirúrgicamente. Durante la cirugía, el testículo que no ha completado su descenso se localiza en su camino de descenso, se separa de los tejidos circundantes y se coloca en la bolsa. La tasa de éxito de la cirugía es de más de 90 de cada 100.