¿Quién puede recibir estimulación epidural?

La estimulación epidural es una intervención médica que ha mostrado resultados efectivos en la restauración de la función y la mejora de la calidad de vida para personas con lesiones de la médula espinal. Sin embargo, este procedimiento innovador no es adecuado para todos los pacientes. Una selección cuidadosa del paciente es crucial para lograr los mejores resultados.

¿Qué es la estimulación epidural?

Antes de pasar a la selección de pacientes, es importante entender qué es la estimulación epidural. En este procedimiento, se coloca un dispositivo cerca de la médula espinal y se envían impulsos eléctricos. Estos impulsos pueden reactivar vías nerviosas inactivas, lo que permite restaurar cierto grado de función en el área debajo de la lesión. Aunque no existe una cura definitiva para las lesiones de la médula espinal, puede ayudar a los pacientes a recuperar el movimiento, mejorar las funciones autonómicas y reducir el dolor crónico.

¿Para quién es adecuada la estimulación epidural?

La técnica está diseñada principalmente para personas con lesiones de la médula espinal, pero no todos estos pacientes son candidatos ideales. La idoneidad de un paciente depende de los siguientes factores:

  1. Tipo de Lesión de la Médula Espinal

  • Parcial: Los pacientes con lesiones parciales de la médula espinal, donde algunas vías nerviosas permanecen intactas, son generalmente candidatos más adecuados. Estas personas tienen un mayor potencial de recuperación porque sus médulas espinales todavía pueden transmitir algunas señales.
  • Completa: La técnica parece funcionar para algunos pacientes con lesiones completas, pero los resultados son más variables. Se está investigando para determinar su eficacia en este grupo.
  1. Nivel de la Lesión

  • Lesiones Torácicas y Lumbares: La técnica se utiliza más comúnmente para lesiones en los niveles torácico (parte media de la espalda) o lumbar (parte baja de la espalda). Estas lesiones a menudo causan paraplejía (parálisis de la parte inferior del cuerpo), y el tratamiento puede ayudar a restaurar la función de las extremidades inferiores.
  • Lesiones Cervicales: Los pacientes con lesiones cervicales (cuello) también pueden beneficiarse del procedimiento, pero el procedimiento es más complejo y conlleva un mayor riesgo de complicaciones.
  1. Potencial Motor y Funcional

Los candidatos deben tener algunas conexiones nerviosas preservadas debajo del sitio de la lesión para maximizar la eficacia de la estimulación. La atrofia muscular no debe ser grave, y los pacientes deben tener un potencial de respuesta muscular adecuado.

  1. Tiempo desde la Lesión

  • Lesión Crónica de la Médula Espinal: La mayoría de los estudios y ensayos clínicos se han centrado en personas con lesiones crónicas de la médula espinal (más de un año desde la lesión). Debido a que estos pacientes ya han pasado la fase de recuperación aguda, es más fácil evaluar los beneficios potenciales de la estimulación epidural.
  • Lesión Aguda de la Médula Espinal: La técnica todavía se está investigando para su uso poco después de la lesión. La intervención temprana puede tener potencial, pero se necesita más investigación.
  1. Salud General e Historial Médico

  • Valores de Salud Estables: Los candidatos deben tener una salud estable sin afecciones médicas significativas que compliquen la cirugía o la recuperación.
  • Sin Contraindicaciones: En casos de osteoporosis grave, infecciones activas, etc., puede ser preferible no administrar el tratamiento debido al daño que causaría al paciente.
  1. Expectativas Realistas

  • Adherencia a la Rehabilitación: La estimulación epidural no es un tratamiento independiente. Los pacientes deben comprometerse con una fisioterapia intensiva y rehabilitación para maximizar los beneficios.
  • Preparación Psicológica: Los candidatos deben tener una mentalidad positiva y expectativas realistas sobre los resultados del procedimiento.

¿Cuáles son las etapas del proceso de selección de pacientes?

El proceso de selección de pacientes para la técnica es llevado a cabo por un equipo multidisciplinario compuesto por neurólogos, neurocirujanos, fisioterapeutas y psicólogos. Los pasos básicos en la selección son:

  1. Evaluación Integral: Se evalúan a fondo el historial médico del paciente, el nivel de la lesión y las capacidades funcionales actuales.
  2. Imágenes de Diagnóstico: Se realizan resonancias magnéticas o tomografías computarizadas para evaluar la extensión de la lesión de la médula espinal e identificar anormalidades estructurales.
  3. Pruebas Funcionales: Se realizan pruebas para evaluar la función motora y sensorial restante en el área debajo de la lesión.
  4. Evaluación Psicológica: Se evalúa la salud mental del paciente y su preparación para el procedimiento y la rehabilitación.

Fuentes

  • National Institute of Neurological Disorders and Stroke (NINDS)
  • Mayo Clinic
  • Christopher & Dana Reeve Foundation
  • PubMed
  • Spinal Cord Injury Research Evidence (SCIRE)