Tratamiento no quirúrgico de la hernia discal

Tratamiento No Quirúrgico de la Hernia Discal

Los tratamientos no quirúrgicos causan menos daño tisular, acortan las estancias hospitalarias y permiten un regreso más rápido a la vida diaria. Además, minimizan los riesgos de infección y anestesia típicamente observados en la cirugía clásica.

Tratamiento de Regresión Discal por Láser Robótico (Regresión)

El tratamiento implica la colocación de una fibra láser a través de un catéter delgado, guiado por un sistema de navegación robótico, dentro del disco con una hernia posterior y la vaporización parcial del núcleo pulposo gelatinoso del disco con energía láser controlada. El efecto térmico del láser reduce la presión intradiscal, la masa herniada se encoge y la presión sobre la raíz nerviosa y la respuesta inflamatoria disminuyen; el brazo robótico asegura una precisión milimétrica en la guía de la aguja a través de la línea piel-hueso, minimizando el riesgo de daño a los tejidos circundantes.

Este procedimiento mínimamente invasivo generalmente se realiza bajo anestesia local a través de una entrada de 1 a 2 mm. Los pacientes a menudo pueden movilizarse el mismo día después de este procedimiento; se prefiere para casos de hernia discal sin pérdida neurológica avanzada y con un anillo externo intacto. La duración del efecto varía según el nivel de la hernia, el grado de degeneración tisular y la adherencia del paciente a la rehabilitación. Por lo tanto, el plan de tratamiento debe ser evaluado individualmente por un médico especialista relevante.

Bloqueo del Ganglio de la Raíz Dorsal (DRG) por Radiofrecuencia

Se aplica a través de una aguja-electrodo delgada colocada junto al ganglio de la raíz nerviosa que emerge de la médula espinal, guiada por rayos X (fluoroscopia) o tomografía computarizada. La energía de radiofrecuencia continua o pulsada enviada desde el electrodo modula las fibras nerviosas térmica o eléctricamente, reduciendo la transmisión del dolor; proporcionando así un alivio que puede durar meses en casos de dolor radicular lumbar/cervical, ciática, dolor neuropático y CRPS.

El procedimiento se realiza típicamente de forma ambulatoria bajo anestesia local y sedación leve: después de confirmar la posición correcta de la aguja con medio de contraste, se administra energía de RF durante 60-120 segundos; los pacientes pueden movilizarse y ser dados de alta en unas pocas horas. Las complicaciones comunes son raras y generalmente se limitan a dolor temporal en el sitio de la aguja, entumecimiento transitorio o bajos riesgos de infección y sangrado; la probabilidad de daño nervioso permanente es muy baja.

Inyección Epidural (Inyección Dirigida)

En el tratamiento de la hernia discal, una “inyección epidural”, también conocida como “inyección dirigida”, es la administración de una mezcla de esteroide + anestésico local (y hialuronidasa si es necesario) en el espacio epidural que rodea la raíz nerviosa, utilizando una aguja delgada guiada por fluoroscopia o ecografía. Estos medicamentos reducen rápidamente el edema y la inflamación causados por la hernia, aliviando así la compresión nerviosa, y por lo tanto pueden proporcionar un alivio significativo del dolor en la pierna o la espalda en cuestión de días.

El procedimiento dura 10-15 minutos bajo anestesia local, y los pacientes generalmente son dados de alta caminando después de unas horas de observación; los efectos secundarios se limitan a dolor temporal en el sitio de la inyección, y rara vez, riesgo de infección o sangrado. Para asegurar una efectividad duradera, se pueden aplicar 2-3 sesiones en un año si es necesario, y el ejercicio posterior, el control de peso y los hábitos ergonómicos apoyan el éxito del tratamiento.

Epiduroscopia

La epiduroscopia es un procedimiento endoscópico utilizado en el tratamiento de la hernia discal, donde un sistema de cámara de fibra óptica delgada e iluminada y un catéter se introducen en el espacio epidural a través del hiato sacro (abertura natural en el cóccix). El médico visualiza directamente el tejido herniado del disco, las adherencias y las áreas inflamatorias alrededor de la raíz nerviosa en una pantalla; si es necesario, las adherencias pueden separarse mecánicamente, el tejido puede reducirse con una sonda láser/radiofrecuencia, y los medicamentos que contienen esteroides o enzimas pueden administrarse con precisión en el sitio objetivo como una “inyección dirigida”.

Este procedimiento mínimamente invasivo, que dura 30-60 minutos bajo sedación local o leve, ofrece menos traumatismo tisular, alta el mismo día y un regreso más rápido a la vida diaria en comparación con la cirugía clásica. Los posibles riesgos incluyen dolor temporal en el sitio de entrada de la aguja, una baja tasa de infección y, rara vez, irritación nerviosa; la evaluación de la resonancia magnética previa al procedimiento y la selección de un equipo experimentado mejoran la seguridad.

Terapia con Ozono

La terapia con ozono es una opción de tratamiento no quirúrgico para hernias discales, mínimamente invasiva y de rápida recuperación, que tiene como objetivo aliviar la compresión nerviosa reduciendo el volumen del disco y la inflamación localizada.

Se aplica a personas con un disco externo intacto en la resonancia magnética, compresión nerviosa moderada y a quienes no son aptos para cirugía o no desean someterse a ella.

Discectomía con Láser

La discectomía con láser para una hernia discal es un procedimiento que implica la inserción de una aguja-catéter delgada en el disco y la vaporización de una porción del núcleo gelatinoso con una fibra láser para reducir la presión interna. Se realiza bajo guía de fluoroscopia o endoscopia; la energía térmica encoge la protrusión del disco, y la presión sobre la raíz nerviosa y el edema inflamatorio disminuyen. Por lo general, toma de 15 a 30 minutos bajo anestesia local, no requiere incisión tisular ni puntos; el paciente puede ser dado de alta caminando después de unas horas de observación.

Aplicación de Células Madre

En la terapia con células madre, las células madre obtenidas de la propia médula ósea del paciente o de un donante se inyectan en el disco herniado con una aguja fina bajo guía de fluoroscopia o tomografía computarizada después de un proceso especial de centrifugación-separación. El procedimiento suele durar 30 minutos bajo anestesia local, y la mayoría de los pacientes pueden ser dados de alta el mismo día. Esto proporciona una señal directa de “reparación biológica” al disco sin incisión quirúrgica abierta.

Las células madre tienen como objetivo reparar la pérdida de proteoglicanos en el disco degenerativo, aumentar la síntesis de colágeno y reducir el edema de la raíz nerviosa al liberar citocinas antiinflamatorias. En modelos de laboratorio y animales, se ha demostrado que estas células aumentan la capacidad de retención de agua, preservan parcialmente la altura del disco y suprimen el proceso inflamatorio que desencadena el dolor.

Clínicamente, ensayos controlados aleatorios publicados entre 2024 y 2025 han demostrado que puede proporcionar una mejora ≥ 50% en el índice de discapacidad y las puntuaciones de dolor; más del 72% de los pacientes informaron una reducción del dolor clínicamente significativa a las 52 semanas.

El procedimiento se aplica en centros experimentados con protocolos éticamente aprobados para pacientes seleccionados sin pérdida neurológica grave, con una preservación significativa de la altura del disco y que buscan una alternativa a la cirugía clásica.

Factores que Influyen en la Elección del Tratamiento

Se tienen en cuenta el nivel de la hernia, la estructura del disco, la salud general del paciente y las experiencias de tratamiento previas. El éxito del tratamiento se mejora con fisioterapia personalizada y ajustes en el estilo de vida.

Rehabilitación Después de Procedimientos Mínimamente Invasivos

La rehabilitación después de estos procedimientos incluye:

  • Movilización temprana (generalmente el mismo día)
  • Estiramientos controlados y ejercicios de estabilidad del core
  • Entrenamiento postural regular y ergonomía
  • Apoyo psicosocial y manejo del estrés

Preguntas Frecuentes sobre el Tratamiento No Quirúrgico de la Hernia Discal

1- ¿Es permanente el tratamiento con láser robótico?

La duración del efecto depende del paciente y la estructura de la hernia; los resultados pueden mantenerse a largo plazo con seguimientos regulares.

2- ¿Cuándo disminuye el dolor después del bloqueo del DRG (Ganglio de la Raíz Dorsal por Radiofrecuencia)?

El alivio comienza dentro de 1 a 7 días para la mayoría de los pacientes, y el efecto puede durar meses.

3- ¿Es riesgosa la epiduroscopia?

Es mínimamente invasiva; el riesgo de infección o daño nervioso es bajo con un equipo experimentado.

4- ¿Tiene efectos secundarios la ozonoterapia?

Raramente se observa dolor temporal u hormigueo en el lugar de la inyección.

5- ¿Desaparece completamente la hernia en la resonancia magnética después de la discectomía con láser?

Generalmente se observa una reducción significativa; no se espera una desaparición completa.

6- ¿Cuánto tiempo dura el período de reincorporación al trabajo?

Es posible regresar a un trabajo ligero dentro de los 3 a 7 días posteriores a los procedimientos mínimamente invasivos.

7- ¿Se pueden aplicar estos tratamientos a mujeres embarazadas?

Las técnicas sin radiación (por ejemplo, ozono, DRG) pueden evaluarse con la aprobación de un especialista en obstetricia y ginecología y un especialista en algología.

8- ¿Qué debo hacer para aumentar el éxito del tratamiento?

El ejercicio regular, el control del peso, dejar de fumar y prestar atención a la ergonomía fortalecen los resultados.

Referencias

  • Mayo Clinic
  • Cleveland Clinic
  • Johns Hopkins Medicine
  • UpToDate
  • Cochrane Library
  • NHS
  • American Academy of Orthopaedic Surgeons
  • Spine-health
  • National Institute of Neurological Disorders and Stroke
  • Medscape
  • PubMed
  • WebMD
  • European Spine Journal
  • World Health Organization
  • Stanford Medicine